En el mes de febrero de 1954, con una tripulación de veintitrés hombres, un bote pesquero, el "Dragón de la suerte nº 5", partió del puerto de Yaizu, prefectura de Shizuoka. En busca de atún, el destino final del viaje eran las Islas Bikini, en el Pacífico Sur. El primero de marzo a las 3:42 de la mañana los hombres ven una nube amarillenta ascendiendo hacia el cielo. Cubiertos de cenizas, nadie en la tripulación es consciente del peligro que los acecha. Sin saberlo en ese momento, serán víctimas de la lluvia radioactiva luego de la prueba de la bomba de hidrógeno realizada por el ejército americano en el atolón Bikini.