Servando, un joven gallego que ejerce de juez en Sevilla, descubre mientras curiosea viejos legajos, un caso de suicidio un poco sospechoso. Él cree que en realidad se trata de un crimen que quedó oculto y decide dedicarse a ello para esclarecer el caso, olvidando a su novia, que vive en un pueblecito de Galicia esperando noticias suyas.